Las condenas domiciliarias han sido siempre una forma de castigo y control, que se aplica cuando se trata de personas que por alguna razn no pueden cumplir su sentencia en prision. En esta ocasin, el caso es diferente: la condena domiciliaria fue elegida por la acusada como una forma de evitar un proceso legal que podia haber durado hasta 20 dles.
La mujer, de 34 aos, estuvo 18 meses en libertad condicional por el delito cometido en su ciudad natal, Cuyo (Mendoza), pero debido a una orden judicial, se la trasladaron a la isla Martillo (en el Golfo San Matias) para cumplir lo que restaba de condena. All aquellos que conocieron a la acusada en su lugar de residencia, confesan que nunca pensaron que ella pudiera estar envuelta en un caso criminal. “Era una mujer normal, casada y madre de dos niños pequeos”, explica una vecina del barrio donde vivia la mujer. Por otra parte, los vecinos aclaran que la mujer siempre era vista con sus hijos y no mostraba ningun tipo de tristeza o dolor, en cambio siempre estaba feliz y con una sonrisa permanentemente fijada. “La veia jugando con sus niños”, dice otra vecina. Pero los vecinos aclaran que nunca se dieron cuenta de que la mujer llevaba una vida doble: en el barrio pasaba su tiempo normal, pero fuera de all aquello era totalmente diferente. Esto fue descubierto cuando la mujer fue trasladada a El Calafate, donde se le detectaron las heridas y lesiones causadas por golpes y mordidas de un animal domstico en su cuerpo. Las fotografas que se han hecho de la acusada muestran como la mujer tiene marcas de mordida y otras heridas que corroboran su historia. “Lo peor es que todas las lesiones que tiene son recentes, no es como si tuviera algo que le pase hace dles”, dice uno de los vecinos. Segn lo informado por la justicia, la mujer vivia en una condici n de abusiva poliamory y fue sometida a golpes, mordidas y castigos sexuales, por su pareja y sus colegas. En el lugar donde viv a veces hasta 20 personas. Este es uno de los casos que se presentan en El Calafate, una ciudad turstica ubicada en la provincia de Santa Cruz, al sur de Argentina. En esta ocasin, el lugar no fue elegido por su belleza natural, sino por ser un lugar remoto y aislado para evitar toda posibilidad de que la acusada sea vista por los demas, ya que ella estuvo en libertad condicional. El caso es una muestra de lo que puede pasar cuando se da un permiso de libertad condicional, pues el lugar elegido por la mujer no era el mas adecuado para vivir, debido a su situacin y los peligros que corre ella. TITULO: La mujer que escogió El Calafate como lugar de cumplir condena domiciliaria SUBTITULO: Un caso inusual en la ciudad turstica ubicada en Santa Cruz Esta noticia es sobre una mujer de 34 años que escogió vivir en El Calafate, una ciudad turística ubicada en la provincia de Santa Cruz, para cumplir condena domiciliaria. La mujer estuvo 18 meses en libertad condicional por un delito cometido en su ciudad natal, Cuyo (Mendoza), pero debido a una orden judicial, se la trasladaron a la isla Martillo (en el Golfo San Matias) para cumplir lo que restaba de condena. Sin embargo, debido a su situación y las lesiones que tiene en su cuerpo, se le detectó que estaba viviendo una vida abusiva y que había sido sometida a golpes, mordidas y castigos sexuales por su pareja y sus colegas. Este es uno de los casos que se presentan en El Calafate, donde la mujer escogió vivir para cumplir condena domiciliaria debido a ser un lugar remoto y aislado para evitar toda posibilidad de que la acusada sea vista por los demás.
